No te encuentras jamás. No te hallas hoy.
No sabes qué te pasa: si es la edad
o el peso de las cosas que no te hallan.
Eres como una brizna echada al viento
tramando un no sé qué, un posible acierto;
dejándose llevar por los zapatos
invisibles y humanos que la aprietan
hasta que su color se vuelve pálido.
Como esa brizna sales a dudar,
a buscar lo que anhelas hace tiempo.
Eres un ser soñando realidad:
la incertidumbre echada por los suelos
como ese trozo de pajita muerta.
© Antonio Macías Luna
Lautaro (Chile), 10 de
abril de 2005
No hay comentarios:
Publicar un comentario